Diario La Verdad
Autor: Julián Mollejo
El informe encargado por el órgano consultivo propone fijar unos límites en los tributos para evitar «la competencia a la baja» entre las comunidades.
Un estudio encargado por el Consejo Económico y Social (CES) cuestiona algunos de los principales argumentos esgrimidos hasta ahora por el Gobierno regional respecto al actual sistema de financiación autonómica.
El coordinador del informe, el catedrático de Economía Aplicada Fernando Ignacio Sánchez, ya adelantó en la Asamblea Regional que la deuda histórica acumulada por la Comunidad a causa del desfavorable sistema de financiación era muy inferior a la que proclama desde hace años el Ejecutivo autónomo, y que el impacto de este injusto sistema en la deuda desbocada de la Comunidad era también menor del que la Consejería de Hacienda sostiene. Y ayer, durante la presentación del estudio, defendió además la armonización fiscal de la que reniega el Gobierno regional.
El estudio, denominado ‘Resultados del sistema de financiación autonómica en la Región de Murcia: Inequidades, infrafinanciación y reformas necesarias’, incluye un capítulo con propuestas para la reforma del sistema de financiación y, entre ellas, destaca la que aboga por el «establecimiento de límites al ejercicio de la capacidad fiscal en impuestos que gravan la riqueza, con el fin de evitar dinámicas de competencia fiscal a la baja que comprometan la suficiencia».
La recomendación se alinea con el Gobierno central y, de llevarse a cabo, amenazaría la supresión del impuesto de sucesiones y donaciones para los familiares de primer grado vigente en la Región.
El informe, según explicó el catedrático Fernando Ignacio Sánchez en el acto celebrado este viernes en la sede del CES, propone también incluir nuevas variables para el reparto de los fondos, como «la tasa de pobreza y exclusión social, así como la población flotante (turistas y desplazados)». También pide la eliminación del fondo de suficiencia, culpable en buena parte de lo perjudicial que el sistema es para la Región.
Sobre la deuda histórica imputable a la infrafinanciación, el estudio la cuantifica en 2.549 millones de euros para el periodo 2002-2018, menos de la mitad de los casi 8.000 millones de euros que el Gobierno regional reclama.
El informe confirma la mala financiación percibida por la Región desde que está vigente el actual sistema, de hecho la peor junto a la Comunidad Valenciana, pero reduce el impacto que ha tenido en las cuentas de la Administración regional con respecto al denunciado hasta ahora por el Ejecutivo autónomo.
En concreto, según el catedrático Fernando Ignacio Sánchez, solo el 30% del incremento de la deuda regional en los últimos años, que supera ya los 10.000 millones de euros, es achacable a la precaria financiación autonómica. No solo era de las peor financiadas cuando se aprobó el sistema, sino que ha empeorado aún más con el paso de los años.
A la cola en ingresos, pero en la media nacional en los gastos
El persistente déficit presupuestario que año tras año registra la Comunidad Autónoma es consecuencia de la escasez de ingresos que le suministra el actual sistema de financiación, pero también del exceso de gastos, según expone el estudio del CES.
En 2019, la Región ocupó el antepenúltimo puesto entre las quince comunidades de régimen común por su nivel de ingresos netos por habitante, tan solo por delante de Andalucía y la Comunidad Valenciana. En cambio, por su volumen de gasto no financiero por habitante, la Región se situó en ese mismo año en el noveno puesto, con un nivel similar a la media del resto de autonomías.
El principal responsable del aumento del gasto de la Comunidad ha sido la sanidad pública. Según el informe, «el gasto sanitario per cápita experimentó un incremento muy superior a la media (2,1% frente al 0,25%). En 2009, el gasto en sanidad por habitante en Murcia era un 8% inferior a la media, mientras que en 2018 era un 10% superior».